En tiempos de crisis económica y ajustes presupuestarios, la gestión de residuos sólidos urbanos sigue siendo un desafío clave para las ciudades argentinas. En Tucumán, el Consorcio Público Metropolitano para la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU) presentó nuevas maquinarias destinadas a mejorar la recolección, el tratamiento y la disposición final de los residuos. El acto, encabezado por el gobernador Osvaldo Jaldo, reunió a intendentes de distintos municipios y representantes del sector privado, en un esfuerzo por fortalecer la infraestructura ambiental de la provincia.
El evento no solo destacó la incorporación de herramientas como palas cargadoras, topadoras, retroexcavadoras y camiones, sino que también puso sobre la mesa la necesidad de una gestión coordinada entre los distintos niveles de gobierno. Jaldo enfatizó la importancia de la colaboración entre el sector público y privado, asegurando que “con menos plata estamos haciendo muchas más cosas que antes”, en referencia a la eficiencia en el uso de los recursos.
Sin embargo, más allá de los anuncios, la pregunta que surge es si estas medidas serán suficientes para enfrentar el problema estructural de los residuos en Tucumán. La provincia genera miles de toneladas de basura diariamente, y aunque el Consorcio Metropolitano ha logrado avances en la recolección y disposición final, aún persisten desafíos en materia de reciclaje, reducción de residuos y educación ambiental.
El gobernador también hizo referencia a la necesidad de concientización, citando al Papa Francisco y su llamado a cuidar la “casa común”. Pero la realidad es que, sin una política integral que incluya incentivos para la reducción de residuos y una mayor inversión en infraestructura, la problemática ambiental seguirá siendo un tema pendiente.
La presentación de estas maquinarias es un paso adelante, pero el verdadero desafío será garantizar que su implementación se traduzca en una mejora tangible para los ciudadanos. La gestión de residuos no puede depender solo de anuncios y adquisiciones; requiere planificación, compromiso y una visión a largo plazo que asegure un Tucumán más limpio y sustentable.
