“Desde la asunción de Osvaldo Jaldo, Tucumán ha logrado que los salarios provinciales superen la inflación, dando estabilidad a los trabajadores en un contexto de crisis económica. Sin embargo, los aumentos en servicios, combustibles y educación siguen desafiando el bolsillo de los tucumanos.”
Desde la asunción del gobernador Osvaldo Jaldo, Tucumán ha logrado mantener una política salarial que supera los índices de inflación, marcando un contraste con la situación económica nacional. Este enfoque ha permitido que los trabajadores provinciales enfrenten los aumentos con mayor estabilidad, aunque los desafíos persisten.
Educación: un sector cada vez más costoso
La educación en Tucumán no escapa al impacto de los aumentos. Los docentes recibirán un incremento salarial del 10%, distribuido en tres etapas: 5% en marzo, 2,5% en abril y 2,5% en mayo. Este ajuste, impulsado por la gestión de Jaldo, asegura que los salarios docentes continúen superando la inflación, brindando un alivio parcial frente a la pérdida del poder adquisitivo.
En el ámbito privado, los colegios han aplicado subas de hasta un 3% en las cuotas escolares, sumando presión sobre las familias tucumanas que deben afrontar estos costos en medio de la caída del consumo.
Combustibles y servicios: cada vez más caros
Los combustibles aumentarán un 2%, elevando el precio de la nafta súper y la premium, lo que tendrá un impacto directo en el transporte y la actividad comercial. Además, se estima que el gobierno podría aplicar una nueva suba del impuesto a los combustibles, lo que generaría mayores incrementos en las próximas semanas.
En el caso de la luz y el gas, aunque el gobierno nacional decidió postergar los aumentos indexados a la inflación hasta mayo, las tarifas subirán en torno al 2% en abril, encareciendo aún más los costos del hogar.
El desafío de los tucumanos ante un panorama incierto
A pesar de que las cifras oficiales indican una desaceleración de la inflación, la realidad sigue marcada por la dificultad para sostener el nivel de consumo y la incertidumbre sobre el futuro económico. La gestión de Jaldo, al garantizar que los salarios provinciales superen la inflación, se posiciona como un ejemplo de estabilidad en medio de la crisis nacional.